Intentamos preguntarle a una de las mossos si entendía la lógica de todo lo que estaba pasando, de si era lógico y normal coartar a unas personas pacíficas que llevan casi dos semanas sin haber producido ningún altercado manteniendo la plaza en impecables condiciones y sin embargo, pasar por alto el hecho de que un par de energúmenos estuvieran destrozando el mobiliario público, jugando con fuego, encendiendo bengalas y haciendo un ruido excesivo a horas totalmente inapropiadas. La mosso d'esquadra, en un tono que no resultaba para nada correcto siendo una agente de la autoridad y debido al tono sosegado y tranquilo con el que se estaba llevando la conversación hasta el momento, contestó exaltada y amenazante: “Yo pensaré lo que quiera, no tengo ningún deber de explicarte por qué lo estamos haciendo”. Personalmente, no entiendo mucho de leyes y no sé si lo que dijo es cierto, si pueden hacer lo que quieran sin dar explicaciones, pero en mi opinión, una persona que está ahí para ayudar al ciudadano, debería decir al menos las razones por las que se está actuando de una forma u otra.
Después de las dos horas que duró la celebración la carretera quedó llena de restos de bengalas, vasos de plástico, botellas de cristal rotas y otros desperdicios que hacían imposible poder cruzar la calle. Los equipos de limpieza y los mossos d'esquadra esperaron pacientemente a que todos los asistentes se retiraran para proceder a la limpieza de la carretera. Pero la plaza no la tocaron, la plaza tuvieron que limpiarla entre varios acampados, una plaza que no habíamos ensuciado ellos, para que luego digan que nos desalojan porque las condiciones de higiene no eran las adecuadas.